Y pensar que hace una semana estábamos deseando que llegase el frío. Qué volubles son la voluntad y el deseo humanos.
jueves, 20 de octubre de 2011
¡Coño! ¡Qué frío!
Y pensar que hace una semana estábamos deseando que llegase el frío. Qué volubles son la voluntad y el deseo humanos.
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4 comentarios:
Te puse un comentario esta mañana pero está claro que evilgoogle odia al iPhone. Básicamente, que lo de la caídita de temperatura sucede todos los años cuando llega el otoño, no es algo gradual, sucede de golpe, igual que las hojas de los árboles se caen en un intervalo de 4 o 5 días, algo que notarás y te debería sorprender.
Lo otro es que el frío no es tan malo. Espera a que te llueva con seis grados y notes como el agua te quema y descubrirás un nuevo concepto de dolor.
Para todo lo demás, calefacción y edredón de plumas. Los holandeses duermen con la ventana abierta, algo a lo que sí que yo nunca me podré acostumbrar.
Cuando vine en octubre de 2009 a pasar seis meses (o una cantidad indefinida de ellos) en Madrid, no recuerdo una caída tan abrupta. Al menos de las máximas. También es cierto que el día 12 de octubre de dicho año no se estaban dando máximas de treinta y dos grados como estábamos sufriendo éste.
El frío es cojonudo. A mí me encanta. Y también me gusta dormir con la ventana abierta. De hecho lo hacía en el invierno de 2009-2010. Aunque no siempre, claro. Había noches que no había forma.
Por cierto, hoy ya hemos bajado hasta siete grados.
Hoy salí de mi casa con 1.7 grados
Eso sí que es frío. La otra vez que estuve en Madrid hubo muchas mañanas que salía con esa temperatura, incluso menos. Aunque sospecho que nunca llegaremos a las mínimas que puedan registrarse en Holanda. Pero la pregunta... ¿con esa temperatura tan baja no te ha dado por quemarte a lo bonzo para entrar en calor? ;-)
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